Nadie pone en duda que el gran auge experimentado por la práctica del deporte en los últimos años ha supuesto múltiples beneficios para la salud de las personas que hacen ejercicio regularmente, sin embargo, practicar deporte de manera inadecuada puede llegar a acarrear graves consecuencias para la salud.
Un entrenamiento inapropiado, escaso precalentamiento o errores en la técnica pueden derivar en lesiones de distinta gravedad. Pero hay otros factores importantes que se deben tener en cuenta y a los que a menudo no se les presta la atención necesaria: la presencia de anomalías en los pies y/o la utilización de un calzado deportivo no idóneo, que no se ajuste de forma correcta a la biomecánica de nuestro pie. Es por ello que nuestro podólogo de Parla insiste en que practicar deporte sin tener en cuenta tales circunstancias puede llegar a ser muy nocivo para nuestra salud en general, y la de nuestros pies en particular. No tener en cuenta la estructura de nuestro pie, y no llevar un calzado adecuado a ella, puede suponer un mayor número de lesiones, incrementar las lesiones recurrentes y convertirlas en crónicas y/o agravar patologías existentes de las que probablemente incluso no se tenía constancia.
Un informe encargado por el Consejo General de Colegios Oficiales de Podólogos (CGCOP) a la Sociedad Española de Biomecánica y Ortopodología (SEBIOR) y a la Sociedad Española de Podología Deportiva (SEPOD) denominado «Estudio de la pisada en los deportistas y sus riesgos (2017)», ha mostrado que el riesgo de sufrir lesiones deportivas es de aproximadamente el 50%, que el 80% de los atletas pisa mal, y que el 33% lleva plantillas no personalizadas. El estudio también indica que las lesiones más frecuentes tienen lugar en el pie, muslo y rodilla, y que en torno al 65% ocurren en la carrera. También advierte de que si bien una zapatilla deportiva adecuada es un elemento preventivo, una zapatilla deportiva inadecuada es un factor que predispone a las lesiones.
Un estudio de la pisada, realizado por un podólogo profesional, supone un informe detallado de la biomecánica de la pisada que consiste en examinar minuciosamente el pie tanto en posición estática (parados) como en movimiento (andando o corriendo). Se analiza cómo se reparte el peso en cada pie, cómo se posicionan los pies en el movimiento, cómo afecta el movimiento a otras partes del cuerpo como las rodillas, la espalda, la cadera… Un estudio biomecánico completo del pie incluye también un análisis de las presiones plantares para determinar si tenemos pie «pronador» (se desvía hacia dentro), pie «supinador», (se desvía hacia fuera), o pie «neutro», (tiene una posición fisiológica correcta, sin desviaciones).
Además, nuestro podólogo de Parla realizará un examen completo de ambos pies con el fin de detectar posibles anomalías o malformaciones, algunas no tan perceptibles, que se deben tener siempre en cuenta a la hora de practicar deporte.
El estudio podológico de la pisada en personas deportistas es fundamental para evitar lesiones, que si bien un alto porcentaje de ellas suelen ser menores, si se hacen recurrentes pueden degenerar en lesiones crónicas graves. Y también sirve para detectar y tratar otras patologías como malformaciones, esguinces, tendinitis, sobrecargas musculares, callosidades…
Cualquier persona que detecte signos de alerta debería hacerse un estudio de la pisada para detectar y corregir posibles problemas o anomalías en los pies. Son señales de alerta el dolor recurrente al caminar, las caídas frecuentes (muy a tener en cuenta en los niños), perder fácilmente el equilibrio, tener tendencia a esguinces de tobillo, callosidades persistentes en determinadas zonas de los pies, fatiga muscular persistente, dificultades para correr o para andar de manera prolongada…
También todas las personas que practiquen deporte de forma regular deberían hacerse un estudio de la pisada para prevenir lesiones, para evitar que cualquier patología pueda afectar al rendimiento, y para adquirir el calzado más adecuado acorde con la biomecánica de sus pies. Además, un aspecto importante de realizarse un estudio de la pisada es que ello repercute en alargar la vida del deportista, en el sentido de que realizar deporte de forma adecuada, con el calzado idóneo, supone incrementar los años en los que se practica ejercicio de manera saludable.
Algo muy a tener en cuenta es que un estudio de la pisada siempre debe hacerlo un profesional especialista, como nuestro podólogo de Parla, para evitar diagnósticos demasiado simplistas y erróneos, ¡no dejes tus pies en manos inexpertas, son tu medio de locomoción!
Puedes indagar sobre anomalías en los pies y tratamientos de podología en nuestro post: «¿Cuándo debo acudir al Podólogo?«